Este blog se ha trasladado, buscando el nuevo blog...

Pages

Black Swan / Cisne negro

El domingo estaba en el tren de vuelta a Barcelona y me dio el ramalazo: me apetecía ir al cine a ver "Cisne negro". Y allí que nos fuimos. Pagué la entrada con ilusión, pero también con cierto escepticismo. Cuando tooodo el mundo pone algo por las nubes, a mí suele decepcionarme. Me pasó con "Misfits", por ejemplo. Y con muchísimas películas que todos adoran y a mí me dejaron indifernete. Falsa alarma: a los 5 minutos ya estaba enamorado de "Cisne negro", y ese enamoramiento duró todo el metraje.


Una historia sobre la obsesión por el perfeccionismo, el frustrante afán de superación al no darse cuenta de que las barreras nos las ponemos nosotros mismos. Culpar a los demás de nuestros miedos y bloqueos. Está claro que no hay que llegar al punto de locura de Nina, pero sí que se pueden extraer lecciones muy interesantes de la lucha de esta bailarina por ser perfecta a través de la imperfección.

Creo que es algo con lo que todos nos podemos sentir identificados. Precisamente, me vino de perlas ver esta película en este momento de mi vida. A veces me preocupa tanto hacer las cosas bien, ir con pies de plomo, que me obsesiono y acabo haciéndolas mal, o de forma forzada. Hay que ser natural, hay que sentir y dejar fluir. Permitir que crezca el cisne negro de nuestro interior para que el cisne blanco que somos brille con todo su esplendor. Como comentamos Jose y yo al salir del cine, es muy significativo que el fundido final sea a blanco.

También debo aplicar esta lección a la hora de bailar: el recuerdo de una noche, con 15 o 16 años, de unos compañeros riéndose de cómo bailaba yo, hace que aún hoy en día baile acartonado e incómodo. Pues no tiene que ser así. Es absurdo que ese recuerdo siga obsesionándome hoy en día. Cisne negro, allá voy.


No es ninguna sorpresa que Natalie Portman borda el papel, llena cada plano. Hubiera sido un tongo que no ganase el Oscar. Más me han sorprendido todos los demás actores y actrices: excelentes Vincent Cassel, Winona Ryder, Mila Kunis y Barbara Hershey. Y me sorprendí especialmente al ponerme cachondísimo con la tórrida escena lésbica. Me consuela saber que no soy el único gay a quien le pasó.

En su día, leí que "Cisne negro" era una adaptación extraoficial de "Perfect Blue", gran película del genio del anime Satoshi Kon. En su día, Darren Aronofsky compró los derechos de "Perfect Blue" para poder recrear la escena de la bañera en su "Réquiem por un sueño". Y es cierto que entre "Perfect Blue" y "Cisne negro" hay muchas similitudes y paralelismos innegables, pero más que adaptación habría que hablar de inspiración. Parten de una premisa parecida para conseguir un resultado distinto y único. Las protagonistas se llaman de forma sospechosamente similar (Mima y Nina), una es cantante J-Pop y la otra bailarina, pero ambas llevan tutú; ambas sienten la presión de ser perfectas en su trabajo, ambas tienen que enfrentarse a cambios drásticos y romper tabúes para dejar de ser esas niñas sobreprotegidas e ingenuas, ambas empiezan a tener alucinaciones y sufrir la persecución de una doble suya.

La historia, la forma de retratar esa obsesión y la resolución final son muy distintas, aunque bien es cierto que "Cisne negro" podría haber tenido otros últimos 5 minutos (sin alterar nada más del metraje) y acabar igual que "Perfect Blue": los personajes de la madre de Nina y la asistente de Mima no son tan diferentes. Aún así, Darren Aronofsky ha conseguido explotar la idea desde su punto de vista y darle suficiente personalidad a su historia y suficiente alma a sus personajes de forma que, por mucho que estuvieras sobre aviso, no pensarás en "Perfect Blue" en ningún momento mientras ves "Cisne negro". Sólo al hacer balance el día después, te das cuenta de esos paralelismos. Es muy interesante comprobar lo que ha hecho Aronofsky cuando conoces el material original.

Conclusión: no tengáis miedo de que os decepcione, hay que verla. Hay que estar dispuesto a cambiar para llegar a ser uno mismo.

btemplates

5 comentarios:

Alejandro Starstruck dijo...

Me pareció fantástica. Para mí, la 2ª mejor película de 2011. Un oscar para el 2º y 3er puesto POR FAVOR!

Alex Pler dijo...

¿Y cuál sería la 1ª?

Efrayn dijo...

Me ha gustado mucho tu crítica, solo discrepo en una cosa: Yo no conocía a este director, aunque ya sabía lo de "Requiem por un Sueño", pero pecisamente porque soy un fan de Perfect Blue, y te acabas enterando antes o después. Como a veces voy tan empanado por la vida, el nombre de "Darren Aronofsky" no me decía nada a la hora de ir a ver "Cisne Negro", fui a ver la película atraído por el cartel con la cara de Natalie Portman resquebrajada cual porcelana (me encantan ese tipo de efectos) y porque estaba relacionada con "El Lago de los Cisnes", historia y música que me encanta.

A los 7 minutos de película, sin tener ni idea de lo que después descubrí, le dije a mi amigo al oído: -Es el estilo de película de "Perfect Blue".- Y esto solo lo pensé en cuanto vi al personaje de Nina reflejada en el cristal del metro y luego la aparente doble que se paseaba por el vagón.
A medida que avanzaba la película y se manifestaban las dualidades tuve cada vez más claro que me recordaba sospechosamente a una película que me gustaba mucho; y luego hay escenas contundentes que hacen que ya no sea solo la trama, sino la escena en cuestión y sus elementos los que te recuerden.

Así que en mi caso, fui sin saber su relación con Perfect Blue, y la tuve en mente durante toda la película...

Alex Pler dijo...

Curioso, Efrayn. La verdad que como ya iba enterado no pensaba que sin saber la relación te recordaría a "Perfect Blue". Lo cierto es que Aronofsky no se ha molestado demasiado en disimularlo y sólo el final lo resuelve de otra forma... Gracias por compartir tu experiencia.

Por cierto: a pesar de todo, ¿te gustó?

Efrayn dijo...

(Uy, que tarde te leo...)

Sí, gustarme me gustó, pero creo que es un poco pretenciosa... Se alimenta más de lo visual que de lo argumental. Nos presentan a Nina ya trasornada desde el minuto 7, como mencioné en el otro comentario.
Y no es por compararla, pero en "Perfect Blue" vives esa evolución obsesiva de la protagonista en primera persona, y aunque llega a un matiz muy complicado, en principio entiendes todas sus reacciones, porque hace lo que hace y porque se frustra a medida que lo hace.
En "Cisne Negro" siguen más la premisa comercial de "si enseñamos a Nina rallándose desde el principio nos aseguraremos del interés del público", pero no le encuentro base psicológica, no la veo trabajada.

Por parte del elemento "El Lago de los Cisnes", me hubiera parecido genial mezclar de alguna manera la historia de Odette y Odill, con la vida personal de Nina, hubiera enriquecido más la historia y la habría alejado aún más de la película de Kon; pero todo ha quedado en un resumen rápido de que "la chica tiene un estreno importante y está muy estresada".

Por último me da pena que quede enterrada la influencia de Satoshi Kon, y que esta película brille por sí misma como una obra original.
Me molesta que a la gente le digas "Perfect Blue" y aparezca un interrogante en sus caras, y cuando les nombras "Cinse Negro", lo peor que te pueden decir es: -Ah, no la he visto.- Ya, pero la conoces, y la otra tiene 13 o 14 años y somos unos pocos que sabemos que existe.

Pero bueno, sí, la disfruté: me gusta la versión que hicieron con la música de Tchaikovsky, me gustaron las escenas de baile, la actuación en general de Natalie Portman, y la atmosfera que envuelve en sí toda de la película.

Publicar un comentario